Cultura Profética dió cátedra en un Movistar Arena completo

La banda icónica de Puerto Rico se presentó en Buenos Aires y fue una LO-CU-RA. 🤯

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Para abrir la noche estuvo Riddim que también está festejando sus 25 años de carrera. 🥳

Cerca de las 21.30 se escuchó una pequeña presentación, los boricuas fueron aparecieron poco y muy tranquilos subieron al escenario y tomaron sus lugares. Los Cultura Profética arrancaron con un medley de varias de sus canciones, elevando la vibra del recinto y levantando la temperatura del público.

Siguieron con “Ritmo que pesa”, “La Complicidad”, “¡Qué Va!”, “Llevarte allí”, “Un deseo”, mientras la banda cada vez pisaba más fuerte sobre el escenario, el público gritaba por Willy pero el seguía protegido por el sonido y su bajo.

Vinieron “Para estar”, “Del Tope al fondo”,”Sobrevolando”, a partir de ahí la noche se disparó y fue un viaje musical por un montón de géneros y estilos musicales, demostrando la amplitud y capacidad interpretativa de los puertorriqueños. Siguieron con “Herida Mortal”, y apareció por primera vez en escena la voz de Bebo Dumont (baterista) en “Ten Valor”.

Inmediatamente llegó un fuerte quiebre en el show, Willy le pasó su bajo a Omar Silva e interpretaron “Caracoles”, ¿quizá su canción más original?. Liberado de su bajo, el líder de los boricuas, hipnotizó a todo el público con su versatilidad, rapeando, cantando, bailando. Cuando comenzó “En la oscuridad” Versoterso contó que era su canción preferida. Siguieron con “Mi balcón”, “Nadie se atreve”, y “Sunshine” con otra gran aparición de su batero / cantante o cantante / batero.

Volvió el bajo para Willy y nos zambullimos en “Rimas pa resistir”, “De antes”, “Llévame” con Bebo a la cabeza, “Fuiste Cruel” e “Ilegal”. Llegó el amague de despedida… y cuando volvieron, Rodriguez dijo “Que ganas de tocar 10 temas más” la gente gritaba desaforada, pero fueron solo 4, ¡pero que 4 temas!.

La noche se empezó a terminar con “Baja la tensión” y “Mr. Swin” con el cuál se armó un lindo pogo al ritmo del ska. Bajamos con “Sin Ti” y llegó el momento de “Saca, prende y sorprende”, por fin el Movistar Arena se liberó y se llenó de humo, humo del bueno, del que hace bien, del que nos libera y conecta. Durante la última canción Willy presentó a todos sus compañerxs (hay que destacar a Tanicha Lopez, una de las coristas que se cantó y bailó todo, increíble) uno por uno mientras improvisaban sobre la base de “Saca, prende y sorprende” el cuál volvió a explotar para el cierre final del show.

Para destacar, el lugar, la organización, la prensa y atención, pero sobre todo el sonido del show que fue increíble. Al finalizar el mismo, pudimos acceder al detrás de escena para enterarnos que quién estaba a cargo era el mítico ingeniero de sonido Errol Brown, quien ha trabajado por ejemplo con Bob Marley.